Movie Review | JOBS

La primera de la que seguramente le seguirán más biopics de uno de los innovadores más importantes de nuestros tiempos, JOBS, nos relata los inicios de su creador y el nacimiento de su compañía: Apple.

Con dirección a cargo de Joshua Michael Stern y el guion de Matt Whiteley, la cinta se centra en el origen de Steve Jobs el emprendedor. Partiendo con una escena que radica en el año 2001 durante la develación de una de sus obras maestras, el iPod, los cineastas entonces regresan el tiempo 30 años y nos sitúa en 1971 para mostrarnos sus días como universitario en Reed College en Portland.

Tiempo después, encontramos a Jobs (Ashton Kutcher), un hombre tan complejo como ambicioso, perfeccionista y disciplinado, trabajando en Atari haciendo uso de su imaginación para desarrollar y programar juegos al mismo tiempo que aspiraba a algo más grande, razón por la que decide renunciar, seguir ese anhelo y hacer equipo con su amigo el ingeniero especialista en hardware, Steve Wozniak (Josh Gad), y empezar a trabajar en sus ideas en el garaje de casa de los padres de Jobs en Los Altos, California, las cuales consistían en combinar una máquina de escribir con una TV lo que daría paso al nacimiento de Apple Computers y el resto –como bien se dice- es historia.

Para hacer esto posible y convertir a Apple en una industria tal cual, Jobs y Wozniak contaron con el apoyo financiero del una vez ingeniero de Intel y empresario Mike Markkula (Dermot Mulroney) quien desde el primer momento, quedó deslumbrado con el ingenio de Jobs y no dudó en ser parte de lo que sería una revolución informática.

Whiteley toma un giro dramático en la historia al enfocarse en un punto crucial de la vida de Jobs, quien al no estar preparado para las demandas financieras y la mentalidad feroz del mundo del negocio, enfrentó -durante el lanzamiento de la Macintosh en 1984- diferencias con su Director General, John Scully (Matthew Modine) y el resto del consejo, lo que dio paso a su destitución y el consecuente declive de la compañía. Por supuesto como es conocido, Jobs regresa en el año de 1996 para dirigirla a sus orígenes y convertirla en la exitosa compañía que conocemos el día de hoy.

El argumento del filme es directo, solo cubriendo por encima algunos sucesos importantes, altos y bajos en su vida profesional sin profundizar en detalles de otros acontecimientos de gran calibre tales como el comienzo de Jobs en la electrónica (lo cual sucedió en Hewlett-Packard donde también conoció a Wozniak), los pormenores del éxito detrás de Apple, su feroz competencia con Bill Gates la cual empezó en 1985, un año después del debut de la Mac (excepto por una breve escena, el tema no se vuelve a tocar), el cambio radical de Apple a cargo del mismo Steve que en 3 años logró llevarla de casi bancarrota a una asombrosa productividad, y a ser la compañía más grande en 13 años, evento que para los líderes del negocio la convierte en la mejor y más exitosa historia en el mercado estadounidense. La reinvención de Pixar que revolucionó las películas de animación de Disney y los triunfantes inventos como iMac, iPod, PowerPC, iTunes y iPhone.

Ashton Kutcher con todo y sus evidentes limitaciones en papeles dramáticos, encarna de pies a cabeza a Steve Jobs, emulando posturas y gestos sin lograr ser suficiente ya que quienes se roban el show son los actores de reparto, especialmente Dermot Mulroney con una sólida actuación como el aliado de Jobs.

JOBS es entonces un montaje de los mejores momentos de la vida de "El Padre de la Era Digital", que carece de profundidad. Si logran pasar por alto la falta de desarrollo de detalles, será sin duda una cinta que disfrutarán.

Título: JOBS

Género: Drama

Fecha de estreno: 4 de octubre, 2013

Distribuidora: ZIMA Entertainment

Director: Joshua Michael Stern

Guion: Matt Whiteley

Reparto: Ashton Kutcher, Dermot Mulroney, Josh Gad, Matthew Modine, Lukas Haas, J.K. Simmons.

Por Carolinna
TV & Movie-holic. Cinephile by nature. Also, I have films reviews deadlines.
Twitter | @Carolinnatas